Raul toco el timbre en el departamento de Elsa sin saber muy bien que iba a decirle, no habian acordado una cita y hacia una semana que el andaba de viaje por el norte, asi que era un visita sorpresa. Volvio a tocar y sintio pasos al otro lado de la puerta, se dio cuenta que lo estaban mirando por el ojo magico, no hizo ningun gesto solo se quedo mirando fijo al ojo de cristal.
Escucho ruido de llaves en la chapa y la puerta se abrio. Era Gonzalo, hola le dijo, esta Elsa?, no, no esta, le respondio Gonzalo sonriendo amigablemente, se fue unos dias al sur con una amiga, me dejo el depa porque estan pintando el mio, pero pasa hombre, estaba preparandome un trago antes de ducharme. En ese momento Raul se dio cuenta que Gonzalo vestia solo una pequeña toalla en la cintura.
Raul dudo un poco pero al final entro, se sentaron en el living con sendos tragos y conversaron un buen rato de diversas cosas. A Raul lentamente se le fue subiendo el trago, y de pronto se dio cuenta que al sentarse la toalla de Gonzalo dejaba a la vista el gran miembro que Raul ya le habia visto esa vez que los vio por la ventana. Su mente siguio recordando esas imágenes y aunque la verga de Gonzalo estaba lacia, el la veiac como esa noche, prarada, larga, gruesa y veia a Elsa chupandola con fruicion…, esto hizo que su propio pico comenzara a erectarse.
Gonzalo le dijo que esperara unos minutos mientras se duchaba y que despues lo llevari en el auto al donde quisiera porque queria pasear un poco. Raul acepto, y Gonzalo le dijo, si quieres esperame en el dormitorio estaba viendo una porno, asi no te aburres. Bueno le dijo Raul, al pararse a Gonzalo se le cayo la toalla dejando la tremenda verga al aire, Raul inconcientemente la miro, y a pesar que estaba en descanso se notaba que era un pichulon especial, Gonzalo se dio cuenta que raul le estaba mirando la pichula y le dijo riendo, si hombre!, la tengo grande, por esos algunas mujeres se me arrancan cuando la ven!, Raul se rio nervioso…
Gonzalo entro al baño y Raul se puso a ver la pelicula porno en el dormitorio. Era de una orgia entre una mujer y dos hombres, en realidad era muy comun y corriente, con las tipicas chupadas de pico, penetraciones por delante y por atras de la mujer y todo eso, pero deues de lo clasico la mujer les pidio que uno de ellos culiara al otro, y jugaran a las cambiadita, los hombres se inastalaron y uno de ellos comenzo a penetrar al otro suavemente, la mujer tomo un consolador y desde una silla los miraba excitado, Raul estaba entusiasmado viendo la escena de la penetracion, su pichula se habia puesto dura bajo el pantalon, cuando aparecio Gonzalo, secandose desnudo y con su verga semi erecta, se me paro al jabonarme le dijo riendo, Raul se rio tambien y sin pensarlo dijo, oye debe ser macanudo tener una verga asi de grande!, mira es como esa que le estan metiendo a ese tipo…
Veo que te atraen los pichulones le dijo Gonzalo, si quieres sentir la sensacion de uno puedes tocar este, y le acerco su verga riendo…, bueno, solo para ver como es le dijo Raul tambien riendo, y Raul acerco la mano a esa verga erecta, con temor porque le daba nervios ver ese tremendo animal, nervudo, grueso, largo, que latia con leves movimientos en los que levantaba la cabeza roja y brillante, lo tomo completo como si fuera un mango de una herramienta, sintio como palpitó con el contacto de su mano y lo apreto un poco, Ganzalo lanzo un quejido de excitación, el pico de Raul se endurecio en su pantalon, Gonzalo se dio cuenta y llevo su mano hacia el, bajo rapidamente el cierre y hurgo en el interior del marrueco hasta que saco la verga erecta de Raul, esta era de un tamaño normal, con su cabeza rosada toda afuera del forrito, Raul lanzo un suspiro al sentir la mano en su pichula y comenzo a subir y bajar su mano en el pico de Gonzalo, este a su vez respondio haciendo lo mismo en la pichula de Raul. Estuvieron asi un largo rato pajeandose sin mirarse, ambos con los ojos entrecerrados disfrutando la paja que le hacia el otro, solo se escuchaban sus quejidos de placer y el ruido del frotamiento de las manos en las vergas duras. Los dos estaban muy calientes y sus pudores habian quedado atrás, en eso Gonzalo dijo, porque no te desnudas para pajearnos bien, nada de penetraciones eso si ok?, si, dijo Raul, solo una buena paja, y rapidamente se desnudó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario