22 jul 2010

EL MODISTO 1

Elsa debía ir a visitar a su hija y recordó que de pasadita estaba el señor que le arregla la ropa, puso dentro del bolso una compostura que hacía días no había llevado y era para la navidad. Una vez que estuvo con su hija se dirigió a casa de Orlando, el que compone y hace ropa, Orlando le dijo que no había problema que pasara a verlo no más, que a lo mejor estaba su pareja a quien ya conocia y otro amigo más pero sin problema.

Elsa estaba en la puerta de Orlando tratando de recordar el número de su depto cuando apareció un tipo estupendo de unos 38 años muy joven pero interesante, alto muy alto, más moreno que rubio y se acercó tambien a la misma puerta. En ese momento Orlando contestó el celular de Elsa y le dio el número de su depto. Elsa estiró la mano para tocar el timbre y se encontró con la mano del tipo alto tratando de llegar al mismo número, se mirarón Elsa dijo disculpe y el dijo no es problema con uno que toque el timbre basta al parecer vamos a donde mismo.

Entraron al edificio y subieron al mismo estrecho ascensor que parecía estaba repleto con el tipo dentro. Bajaron en el cuarto piso y se abrio la puerta de Orlando y dijo que bien visitas y estupendas visitas, pasen chiquillos, Elsa dejo la pasada al amigo de Orlando y este retrocedio para dejarle el paso a ella se produjo un enredo en el angosto pasillo la cosa es que el tomó a Elsa de los hombros y la guió dentro y le dijo no usted primero, fue una operación rápida pero segura. En eso volvió a sonar el timbre y era la pareja o el amigo de Orlando. Saludo a Elsa ya que la conocía y le preguntó como le había ido en el matrimonio de su hija, Orlando le dijo eres muy apuron si no sienta la señora y ya la estas interrogando sírvamos un café que sea. Se internaron los dos en la cocinilla que en realidad no es internarse es sólo caminar un paso. El amigo nuevo se sentó frente a Elsa sin hablar solo contemplar ésta se comenzó a poner nerviosa muy nerviosa, ella estaba acostumbrada a dejar a los hombres sin habla pero cohibidos este estaba sin habla pero elucubrando, sopesando, Elsa se preguntaba que estudiaba tanto y no se atrevía a moverse siquiera como andaba con faldas sus piernas estaban casi medio expuestas ya que cuando llegó se sentó sin cuidado ella estaba acostumbrada a sacarse la ropa delante de Orlando así que nunca había tenido mayor atención a su postura.

Orlando y el amigo salieron de la cocina y como Orlando era más experto en estos asuntos, hizo de inmediato la observación parece que tu amigo esta embobado mirando a mi clienta. bueno amigo cómo se llama usted y contestó con una voz microfónica, Gonzalo. Bueno Gonzalo te sirves un café o un trago y Gonzalo dijo la señora toma café yo también, Orlando le dijo te dio fuerte hombre.

Bueno se conversó de todo un poco ya que los dos mariconcitos lo único que querían era saber alternativas del matrimonio a donde Elsa había mostrado su creación y que habían sabido por una amiga de Elsa que tambien era clienta que Elsa se veía demasiado bien y que era la mejor de la fiesta. Bueno en esta conversa Gonzalo solo observó no habló nada, nada.

Elsa dijo debo irme traje un chaleco para que le pongas cierre si me lo puede tener para el lunes, me voy, entonces los dos mariquitas le dijeron pero señora Elsa no se vaya si total usted no tiene que llegar temprano a casa no hay nadie para su control.

Tengo mi conciencia de control Orlando. Orlando le dijo mire nosotros ibamos a hacer una presentación para un video a Gonzalo y nada más si quiere se queda es algo artístico y asi pasa el rato y se entretiene.

Elsa dijo bueno ya de pura curiosidad ya que cuando le dijo un video artístico pensó quizás que mariconada van a mostrar debo quedarme para curiosear.

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