24 jul 2010

EL MODISTO 3

Elsa levantó la cabeza y Gonzalo se habia sacado la camisa y la miraba de pie, Elsa se sintió enana Gonzalo le tendio una mano la levantó y le comenó a sacar la ropa Elsa no atinó a decir no ni a impedirlo sólo quería que terminara pronto de sacarle la ropa ella trató de soltar el cinturon de Gonzalo bajó su cremallera y calló el pantalon Elsa ya estaba sin blusa y sin falda solo zapatos y ropa interior roja Gonzalo la miró y le dijo te vo deliciosa y puso sus manos en el cuerpo de Elsa, pasó sus manos por toda ella recorrio su cara, su pelo, su cuello su espalda para volver a sus senos que encendieron más aún a Elsa, le sacó su sosten y tomo sus pechos los besó y tomo su pezón para jugar con él este se puso duro como una piedrecita y le dijo bruja asi como esta tu pezoncito, mi verga tócala te deseo tanto y la beso en la boca en el cuerpo en todas parte le sacó sus calzoncitos chiquitos y sumegió su lengua en la chorita mojada de Elsa . También recordó la última mirada por la ventana la pareja del frente hacía lo mismo miró de reojo y estaban los dos en posición de chupar cada uno el sexo de su oponente se acariciaban con ganas, ni se movían en la cama chupaban con tantas ganas que Elsa tuvo la sensacion de escuchar los quejidos de la pareja pero no era esos los quejidos que escuchaba sino que era Orlando con su pareja este le habia metido su pichula a Orlando y galopaba sobre el Orlando que se retorcía de gusto y pedía más adentro más adentro y mueve muevete...

Elsa agarro la gran verga de Gonzalo con las dos manos, era inmensa y estaba muy dura y tensa, la miro con susto, nunca habia visto un pico tan grande, me va a doler cuando me penetre penso, pero Gonzalo ya estaba empujando el miembro hacia la boca de Elsa, asi que esta comenzo a besarle la puntita, y lentamente fue introduciendola en su boca, preimero el gande, esa cabeza roja y brillante, de piel muy suave y lisa, la chupeteo un buen rato, mojandola con su saliva, y dandole leves apretoncitos con los labios y los dientes, Gonzalo se quejaba de placer y se estremecia a cada uno de esos apretones, Elsa apenas escuchaba las voces de los maricas que estaban culiando desaforados en la cama, toda su atencion estaba en esa verga monumental que tenia en sus manos y su boca…, Gonzalo de pie le tenia tomada la cabeza con ambas manos y la apretaba contra su pico dando quejidos y gritos de placer, a lo que Elsa respondia dando chupones en la cabeza de su verga.

Despues Elsa fue introduciendo lentamente el resto de ese miembro en la boca, lo sentia duro contar su paladar, lo sentia hincharse, latir, endurecerse, cuando lo sentia a punto de eyacular, ella se lo sacaba suavemente de la boca apretando la suave piel que lo cubria, y se lo introducia de nuevo, con los labio apretandolo para que el sientiera toda la intensidad de la penetracion…, por ahí desvio los ojos hacia los maricas y vio que la pareja le habia metido todo el pico a Orlando por el hoyito, estaban como dos perritos culiando, Orlando en cuatro patas encima de la cama y su pareja por detras penetrandolo y moviendose ritmicamente, esa vision la calento mas aun, y se introdujo toda la gran verga de Gonzalo en su boca, hasta adentro, hasta que el glande toco el fondo de su paladar, casi provocandole arcadas, a la vez Gonzalo empujo su pico mas y mas, Elsa queria seguir gozando y antes que él eyaculara se saco el inmenso pico de la boca y se tiro en la cama con sus largas piernas abiertas, mostrandole a Gonzalo su chora mojada y abierta como una anhelante rosa roja humedecida por el rocio, él la miro con ojos salvajes y con una mano en su tremenda verga erecta se acerco a ella, Elsa estaba asustada, por un lado no sabia si él la iba a penetrar altiro con esa coyoma de burro o le iba a pasar antes su lengua por su zorrita caliente…

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